La forma humana típica es capaz de lograr una serie de hazañas increíbles que parecen suspender o desafiar la forma en que la ciencia nos dice que funcionan las cosas. Los atletas, por pura fuerza de voluntad, pueden terminar levantando algo que sus cuerpos no deberían poder sin sufrir algo peor que espasmos musculares. Las personas pueden adaptarse al trauma físico extremo causado por un accidente automovilístico y desafiar las predicciones de que nunca volverán a caminar. Si bien, en general, estas increíbles hazañas son útiles en una serie de situaciones, hay reacciones físicas que algunas personas ven con bastante desagrado. Entre estas "reacciones desfavorables" se encuentra algo conocido como "meseta de pérdida de peso".

Esencialmente, la "meseta" es un término que se usa para describir una situación en la que el cuerpo se ha vuelto incapaz de perder más peso, generalmente debido al desarrollo de una tolerancia a las píldoras y métodos de pérdida de peso que se utilizan. Esencialmente, la meseta se alcanza cuando el cuerpo desarrolla tolerancia a las limitaciones y prácticas del régimen, lo que permite que la tasa metabólica del cuerpo se ajuste a cualquier píldora o técnica de pérdida de peso que se esté utilizando. La mayoría de los libros de dietas ignoran decididamente la existencia de la meseta, principalmente porque puede verse como una negación del propósito de la dieta y, por lo tanto, es mala para el marketing. Hay, sin embargo, maneras de contrarrestar el desarrollo del cuerpo humano de una tolerancia a los regímenes de entrenamiento y las píldoras para bajar de peso.

El metabolismo humano, cuando se le presenta un patrón, eventualmente se adaptará a ese patrón. Es esta adaptabilidad natural del cuerpo humano la que puede causar el estancamiento de la pérdida de peso, particularmente si la dieta y los hábitos alimenticios de la persona han sido alterados para la pérdida de peso. Como tal, cambiar el patrón, una vez que haya pasado una cantidad de tiempo suficiente, permitirá que su plan de dieta o píldoras para bajar de peso vuelvan a ser efectivos. Este truco consiste esencialmente en confundir el metabolismo humano y, a menudo, se toma como una forma bastante drástica de hacer que el cuerpo vuelva al "modo de dieta". Hay, por supuesto, varias formas de alterar efectivamente ese patrón sin causar daño permanente al cuerpo.

Agregar fuerza y ​​entrenamiento con pesas y modificar el programa de ejercicios también puede ayudar a alguien a superar la meseta, en la mayoría de los casos. El cuerpo aún quemará los nutrientes durante la actividad física, aunque la tasa metabólica del sistema digestivo puede adaptarse de tal manera que se retenga más peso en lugar de quemarlo durante el ejercicio. Aumentar la dificultad de los ejercicios, o cambiar los movimientos para enfocarse en áreas musculares menos desarrolladas, puede obligar efectivamente al cuerpo a readaptarse. Mientras el cuerpo está ocupado adaptándose a los cambios, también puede comenzar a perder peso nuevamente. Sin embargo, este método se utiliza mejor con alteraciones en la dieta de la persona para maximizar la eficacia.

Otro truco que se utiliza para sortear el problema de la meseta es hacer cambios en el intervalo de tiempo entre comidas. El reloj interno con el que opera el sistema digestivo del cuerpo humano puede modificarse para adaptarse a los propósitos de uno, siempre que se realicen las modificaciones adecuadas en la dieta y los hábitos alimenticios. Una acción simple como alterar el horario de las comidas, como agregar más comidas pero reduciendo la mayor parte de cada una, puede tener un efecto apreciable en la alteración de la tasa metabólica. El concepto clave de este método es engañar al cuerpo para que queme la comida más rápido, y así recuperar el programa de pérdida de peso y la dieta.

Al considerar las opciones, es útil tener en cuenta que lo que funciona para una persona puede no funcionar para otra. Algunos metabolismos más lentos pueden requerir una combinación de programa de dieta y modificaciones del régimen de ejercicio, mientras que otros pueden arreglárselas simplemente acortando el descanso entre comidas. El punto crítico es encontrar un método que funcione y sea efectivo para un metabolismo específico, lo cual puede ser un proceso que requiere mucho tiempo.